Pateando por Roma, uno es testigo del estallido de un arte urbano que ha hecho que las paredes y fachadas griten en silencio gracias a almas ardientes e inconformistas para quienes las calles son territorio a blindar ante el poder, devolviendo vida y contenido a las esquinas.
Los stickers se plantan sin pudor ante los paseantes revolviéndoles el pensamiento, sacándoles una carcajada o una lágrima contenida, interrogándolos en pleno pulmón de Roma.
Como elogio a la estética y a la crítica creativa, un Adaki’s, uno de los nuestros, ha recopilado 50 glues en su escapada a la Ciudad Eterna. Desde las pinturas rupestres el Street Art sigue evolucionando. Pasen y vean.