Se puede pensar que un blog es como tener un CV corporativo o un catálogo de servicios actualizado. Es mucho más. Un blog realiza una labor comercial ininterrumpida en todo el mundo. No hay límites temporales ni geográficos.
¿Vamos viendo el potencial que puede tener?
Pues ahí va otra gran contribución del blog: los buscadores adoran que las webs actualicen los contenidos, de modo que si tienes un apartado de noticias o blog actualizado, Google te tratará mucho mejor y aparecerás antes en los resultados de las búsquedas. Mejorarás el posicionamiento de tu web.
Pero hay más. Un blog de calidad eleva el tráfico de la web.
Es decir, se gana en presencia, en posicionamiento y en tráfico.
¿Por qué entonces la mayoría de empresas se niega a tener un blog?
Porque requiere un esfuerzo en tiempo y trabajo. Y en el caso de empresas internacionalizadas, también en traducciones. Pero funciona.
Y funciona porque los clientes agradecen un blog hecho a conciencia. Aún más si se ofrece información útil como descargas, webinars, manuales, etc. Los clientes y los clientes potenciales recurrirán al blog y es donde tiene que plasmarse toda la actividad.
Un blog constituye una plataforma propia en la que una empresa puede hablar de sí misma y ofrecer la imagen que desea transmitir.
Por muy reacia y hermética que sea una empresa, siempre habrá momentos en los que necesite un canal de comunicación. Y un blog cubre esta necesidad junto con las redes sociales.
El primer quebradero de cabeza lo genera, normalmente, el contenido. “¿De qué vamos a hablar?” se preguntan nuestros clientes.
Puedes valerte del blog para:
- Informar de los valores del producto o servicio
- Hablar de la propuesta de valor de la empresa
- Complementar el lanzamiento de un producto nuevo
- Hablar del sector en un contexto más genérico
- -Entrevistar, por ejemplo, al director del departamento comercial
- Invitar a tus clientes a una feria o evento
- Felicitar la navidad
- Comunicar en situaciones de crisis
- Publicar y dar difusión a los catálogos
- Lanzar mensajes directos como “Comparte tu opinión con nosotros”
- Hablar de detalles como el diseño del stand para una feria
Hay que perder el miedo a la hoja en blanco y comunicar de forma sencilla y natural todo aquello que aporte un valor añadido. Cuanto mayor conocimiento se tenga del producto o servicio, de la empresa y del sector, mejor. Por esta razón, es muy importante que la persona que se encargue de actualizar el blog tenga un conocimiento profundo de lo que va a comunicar, que tenga cierta habilidad para la redacción y capacidad emocional, porque hablamos de la relación empresa-cliente.
En la actualidad, son muchas las empresas que contratan una agencia para la realización de contenidos. Pero cuidado, hay muchas agencias que solo tienen en sus plantillas diseñadores y programadores. Hay que asegurarse de que cuentan con un periodista o redactor publicitario para un correcto tratamiento de la información.
Y recordad, un blog es sinónimo de presencia. Presencia activa.
¿Qué os parece?
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